En 1961 Antonio Valtl decidió buscar un terreno que le permitiese ampliar las instalaciones de su empresa, la editorial Herder, para lo cual adquirió el edificio del chaflán formado por las calles Roger de Flor y Provença y lo encargó al arquitecto Josep Ribas González.

Paralelamente, en 1965 y aprovechando la oportunidad de adquirir el chaflán opuesto al edificio Herder, el formado por las calles Provença y Nàpols, los Valtl encargaron nuevamente a Ribas la construcción de un inmueble destinado a un taller de artes gráficas, Grafesa, que debía cubrir las necesidades de Herder y además estar abierto a otros clientes. Grafesa tiene su origen en la prestigiosa Impremta Elzeveriana, fundada en la época del modernismo y que ellos habían comprado en los años cincuenta.

Ribas proyectó un edificio estrictamente industrial, compuesto de sótano, planta baja y planta primera para las instalaciones de la imprenta (maquinaria, almacén, entrada de camiones, etc.) y dos plantas para despachos. Al ser un inmueble de nueva construcción, sin acondicionamientos preexistentes, tanto la estructura interior como los paramentos exteriores son mucho más libres, aunque la pauta de los perfiles verticales regula su fachada. La sucesión de las diferentes ventanas verticales crea una continuidad que da gran luminosidad al edificio y sugiere un efecto de muro cortina, aunque no lo sea.

• Fecha: 1972
• Superficie: n/a m²
• Estado: Completado
• Localización: Barcelona, España